Comparte Difunde Impulsa Regala el conocimiento
En este mercado laboral tan competitivo, en el que los nuevos tipos de empleo y las relaciones laborales mutan continuamente, y en el que cada vez más se privilegia la especialización y el valor diferencial que puedes aportar a una empresa, el currículum vitae, tal como se ha concebido durante tanto tiempo, ha quedado prácticamente obsoleto.
En Empapelarte ya hemos hablado de la necesidad de reinventar el currículum y de cómo la marca personal emerge como una herramienta imprescindible para poder posicionarte como profesional y ser competitivo. Para profundizar aún más, en esta oportunidad queremos aportar algunas ideas concretas acerca de cuáles son los requisitos que debería cumplir un currículum vitae de marca personal para ser efectivo.
¿Qué debe incluir un currículum de marca personal?
1. Debe apuntar a un objetivo
Antes de definir tu marca personal y, claro está, mucho antes de redactar el contenido de tu currículum, debes tener claro a quién te quieres dirigir, para anticiparte a una idea de quién lo leerá y qué querrá encontrar. Por eso, es muy importante que decidas qué tipo de trabajo estás buscando y que realices una lista de las empresas para las que deseas trabajar y que consideras que pueden darte el empleo que deseas.
Te puede resultar de mucha utilidad buscar anuncios y descripciones de posiciones similares a las que apuntas, para saber cuáles son los requerimientos más comunes y determinar cómo puedes cumplir con ellos. También te servirá investigar los desafíos y necesidades de tus empleadores objetivo, para definir cómo podrías ayudarlos y optimizar tu currículum vitae en función de ello.
Recuerda: no puedes alcanzar un objetivo si no tienes uno; y sin un objetivo, tu búsqueda será larga y con resultados que seguramente no te satisfarán.
2. Tiene que ofrecer una propuesta de valor única
La marca personal ya no es una opción, es una necesidad. Debes presentar el valor único que ofreces, porque la competencia es tan grande, que solo diferenciándote tienes posibilidades reales de conseguir la posición que buscas.
Para definir tu propuesta de valor, piensa en la combinación de fortalezas, atributos y cualidades que mejor te representan. Con esta información, crea un extracto breve (3 a 5 líneas) en el que debes hablar de tu área de especialización y de tus atributos personales más relevantes, utilizando las palabras clave relacionadas con tu nicho.
3. Debe estar enfocado en los logros
En lugar de desarrollar largas y aburridas descripciones de las tareas que realizabas en tus empleos anteriores, es mucho más efectivo incluir listas de los logros o resultados específicos relacionados con estas tareas y comentar cómo contribuyeron a la empresa. ¿Sabes cuales son las dos piezas fundamentales de un CV?
Estos son ejemplos del tipo de preguntas que te pueden ayudar a centrarte en tus logros: cómo conseguiste a que la empresa ahorre dinero, cómo mejoraste los procesos, cómo optimizaste la comunicación con el cliente, cómo subiste la productividad, cómo conseguiste nuevos clientes, cómo innovaste en el diseño de productos/servicios, etc.
4. Tiene que ser legible, bien estructurado y atractivo
Si bien este requisito no es exclusivo de un CV de marca personal, aquí es más importante que nunca. Los reclutadores cada vez le dedican menos tiempo a la lectura de currículums, es normal que filtren de forma masiva solo los que realmente captaron su atención al hacer una lectura global.
Por este motivo, es fundamental cuidar el aspecto visual del currículum vitae. Para simplificar este paso, puedes optar por contratar los servicios de redacción y diseño de currículum, acorde con el tipo de trabajo que buscas y con la forma en la que quieres que perciban tu marca personal. De esta manera, te asegurarás de que esté bien estructurado, que haya una coherencia en el uso de fuentes y que tenga un aspecto realmente profesional. Solo tendrás que preocuparte por enviarlo y recibir la deseada llamada de .
5. Debe estar perfectamente escrito
No está de más recordar que las faltas de ortografía o la redacción gramaticalmente incorrecta restan muchísimo. Si quieres mostrarte profesional, no puedes permitirte un CV con errores. Revísalo varias veces y, si está entre tus posibilidades, pídele a alguien más que lo revise nuevamente por ti.
También es muy importante que el contenido sea conciso, que evites las frases vacías o trilladas y que insistas en el uso de términos específicos relacionados con tu nicho o la posición a la que apuntas.
No exageres con la experiencia laboral y con tu formación. Si has realizado trabajos de todo tipo, jerarquiza solo los que sean relevantes para fortalecer tu marca personal; es decir, los que mejor representen tu evolución como profesional y ejemplifiquen para qué tipo de tareas estás cualificado.
En conclusión, ya no basta con listar trabajos y títulos obtenidos. Para poder ofrecer un valor diferencial y competir por el trabajo que buscas, es importante que vayas siempre un paso más allá y optimices tu currículum de acuerdo con tu marca personal.